domingo, 16 de junio de 2013

la cinefilia de María Dolores


La visita al museo Lumière, edificio casi colindante con el estudio de Clara, llegó con un empujón artístico de luces, cámara y acción. En el barrio de Monplaisir, un pequeño castillo de arquitectura modernista se alza imponente en una plaza que un día vio nacer entre cuatro paredes un aparato que guardaba fotogramas y los reproudcía a intervalos definidos para crear una secuencia animada : el cinematógrafo. María Dolores vino desde su amado sur a encontrarse con un cielo que por aquel entonces era gris y amenzaba lluvia. Vino con ganas de conocer a fondo a la fotógrafa escondida detrás de los espejos y los laberintos de escaleras, eso sí, siempre cerca de una buena comida, pues Lyon como ella nos dijo, es la ciudad de las madres cocineras. Nuestros planes fueron caseros, fuimos al cine, a museos y dimos algún que otro paseo allá donde las chimeneas son de ladrillo rojo y el humo que desprenden huele a queso fundido.


Amante del buen cine, se quejó de los efectos especiales de la nueva adaptación de the Great Gatsby (película con una banda sonora tan actual como increíble. Si pincháis en el nombre os llevará directamente a la playlist de Spotify). Sin embargo se le abrieron los ojos con la casa de los ricos hermanos Lumière, con su cristaleras d 'art nouveau, sus suelos emparquetados con madera que todavía hoy brilla con un barniz que seguro pisaron los pies de Auguste y  Louis - Philippe. Entre sus muros encontramos a los antecesores del aparato que dio vida al cine como la linterna mágica o la cámara oscura, fotos en blanco y negro, uniformes, mobiliario de la época y unas lámparas que desprenden una luz tan intensa como cuidada pues las bombillas están encerradas en enrrejados de flores y candelabros de metal de una belleza exquisita. Maria Dolores compartió con nosotros un poquito más de su amplia sabiduría y nos hace sentir que es una compañera más, que su experiencia solo es un grado, pero que su actitud es tan joven como la vida Erasmus misma que los tres compartimos. Hace tan solo unas horas me entero de que ella misma nos habría aconsejado, solicitado que este verano fuésemos a vivir con su casero Derek Moxon para así continuar la aventura que emepezó hace tan solo nueve meses y que todos seguro conocéis o deberiáis ya mismo hacerlo via : http://erasmusalos50.blogspot.com . Tal propuesta es tan atractiva que sino este verano, en el cual ansío más que nunca sufrir el poniente valenciano, el próximo, aceptaré sin rechistar. Por lo demás se me acaba el tiempo aquí en la ciudad del león y las colinas que rezan y trabajan. Para ser exactos en unas 72 horas este blog cambiará tanto su contenido, como la ubicación de quien lo escribe. Eso es un nuevo proyecto, pero antes haré una última referencia, una última entrada con sabor a café de las cinco combianada con Sol de las siete de la tarde. Gracias y ars magna lucis et umbrae para todos.


Aquí el enlace a la página web del museo que también cuenta con un festival de cine que ya fue retratado y admirado por aquí un servidor ( el premio lo recibió este año Ken Loach, director de El viento que agita la cebada, entre otras muchas películas ).
Fotos Clara Martínez


domingo, 9 de junio de 2013

LIVE of the year




Cae un atardecer lluvioso cerca de los teatros romanos que coronan el monte donde se alza la catedral barroca archiconocida de Fourvière. Me he tomado una infusión de vainilla dulce y humeante para poner a mi cuerpo en estado de paciencia y serenidad pues tengo tres horas de inmobilidad por delante. La primera cola de un concierto serio/importante en mi vida me espera y llego puntual a la cita. Bajo el paraguas azul de mi derecha está Clara con su cámara en reposo pero con una mano temblorosa que no la abandonará hasta pasadas las doce de la noche. Creo que está más nerviosa y emocionada que yo. La lluvia es intermitente, como mi estado de ánimo en los momentos previos a ver al niño de madera. Después de una larga espera la primera fila es nuestra. El techo del gran escenario negro nos recubre mientras que detrás de nosotros un mosaíco multicolor de chubasqueros se va dibujando. La gente aguanta estoícamente: con los pies fríos no piensan bien y con los labios cortados no articulan muchos sonidos hasta la entrada del telonero Harold Martínez, un músico muy experimentado con aire rockero y un batería poseído de ritmo al cuál se le prolongaban baquetas en lugar de manos a partir de las muñecas. Buen comienzo para la noche mágica.

[ 20 minutos después y ... ]
 ...Con chaqueta de Givenchy, barba de meses y una gorra negra apareció!


Woodkid presentaba en su ciudad natal su álbum Golden Age que lo ha llevado a convertirse por fin en un cantante acreditado, además de ser un productor de vídeos mundialmente conocido. Su álbum, al igual que su música, es gris, tribal y muy sinfónica. Sus canciones siempre están acompañadas de vídeos que transportan al público a esferas como la de la ciudad norteamaricana de Brooklyn, a la orilla de un río o bien te pasea en barco por un río de aguas tumltuosas. Durante su LIVE se va parando para respirar y preguntar al público si ça va? Llora durante IRON y luego confiesa que estar allí es algo muy raro, ya que él hace tan solo diez años era anónimo en su barrio y nunca pensó que podría un tiempo más adleante actuar en un sitio tan común para él como son los amfiteatros.

La múscia envuelve todo. Los visuales y las luces son impresionantes. La Orquesta Nacional de Lyon intensifica la emoción con acordes desgarrados de violines y golpes de tambor tan sonoros que la entrada y salida de Woodkid en escena se parece a las de los antiguos marajás hindús. Lleno hasta la bandera, Woodkid llama al público a saltar con las partes más electrónicas de sus temas y estos le responden sobretodo en el Run boy run, mi preferida : 

Run boy run! This world is not made for you
Run boy run! They’re trying to catch you
Run boy run! Running is a victory
Run boy run! Beauty lays behind the hills


Run boy run! The sun will be guiding you
Run boy run! They’re dying to stop you
Run boy run! This race is a prophecy
Run boy run! Break out from society

El concierto acaba con una lluvia de almohadones previamente instalados en las gradas de granito con los que Woodkid juega a esquivar y devolver con una sonrisa que no se le borra en ningún momento. Nos ha guardado una sorpresa para el final : canta I R O N en acústico y al igual que me quedé sin voz cuando lo vi, me quedó sin palabras y adjetivos para continuar...




IRON LIVE from Jose Vázquez on Vimeo.

Las fotos y el vídeo está vez llevan mi firma. No obstante no dejéis de visitar : 


viernes, 7 de junio de 2013

Coffe's road

En París se respira contaminación, lluvia ácida y a veces olor a café. Los hay que se lo toman con prisas y corriendo mientras leen el periódico del día, donde leo desde lejos que Hollande pierde cada vez más popularidad entre los habitantes de la capital francesa. Otros, como los señores mayores y entrañables de la segunda foto, prefieren ser algo más clasicistas y a la vez literarios y se dan cita en la terraza cubierta de Les Deux Magots puesto que en el Café de Flore les han negado un asiento con una amplia sonrisa escondida de falsa educación. Flore ya no es lo que era...Desde que John Galliano con más grado de alcohol en sus venas que de certeza promulgara su admiración por Hitler, una sombra oscura se pasea delante de los clientes que ahogan cócteles y pastelitos minuciosamente decorados.  La película francesa Intocable, sin embargo, consigue resucitar un poco el agradable ambiente de este café que hace tan solo cincuenta años conoció a Sartre y Beauvoir entre muchas otras plumas. Nosotros sin embargo tenemos poco dinero encima y mucha cafeína que tomar, pues no madrugamos pero si trasnochamos con excusas culinarias. Hacemos una pequeña parada en el café de la Rotonde un martes y un miércoles lluvioso tomamos asiento en los Magots para degustar su especialidad azucarada : el chocolat viennois à l'ancienne.  El camarero algo ácido de humor español nos mira con sonrisa burlona y turista, pero aún así nos da un trato que consideramos aceptable para no levantarnos con mala cara pero si para no dejarle ni un céntimo de propina. Luego que no vengan pidiendo puntos en Eurovisión con la excusa de que somos vecinos!



Domingo
Resureección
Vida o muerte
Hemos ido a Pere Lachaise a buscarnos
Nos hemos perdido entre las calles grises
Pero entre el musgo soldados se descubrían
Ante unos ojos que jamás vieron cruces negras
Pero sus corazones
Radiaban fuerza
Como la llama 
Inversa del poeta
Que dibujaba entre
Versos y recitaba 
entre trazos.


http://clickstantanea.tumblr.com/

sábado, 1 de junio de 2013

p y r a m i d s



En París hay un puente que, a pesar de estar construido con un acero más ligero que el viento que corre entres sus rendijas, pesa más que los otros. Cuando brilla el Sol en la capital, miles de destellos se desprenden de la inmensidad de candados que hay atados en él. Hay de todos los tipos, colores y formas. Están atados entre ellos, con fechas desconocidas, con nombres de todos los rincones del mundo que hablan en un mismo lenguaje. A veces me pregunto que harán las parejas con las llaves que   cierran su amor cerca del museo d'Orsay : las tirarán al río y contribuirán a la contaminación de su suelo? Se guardarán una copia por si algún día se rompe lo que debería haber forjado para siempre el metal? El caso es que el cine ha hecho mella en las mentes volátiles de los turistas y es que esta nueva tradición moderna viene inspirada de la película "Tengo ganas de ti" adaptada de la novela del italiano Federico Moccia donde un enamorado le jura a otra enamorada que estarán juntos para siempre. Se me saltan las lágrimas de cocodrilo imaginando la escena romántica. Que pensará entonces Léopold Sédar Senghor, poeta de la negritud, de esta nueva re-metaforización de su querida pasarela?  Como Paris es de todos y de nadie, tanto él como yo, los dejaríamos a merced del óxido y del recuerdo. 




El paseo de hoy, sin embargo, termina en las afueras del museo del Louvre. Somos jóvenes y se nos han acabado nuestros días en París. Las inmensas galerías del antiguo palacio de las Tullerías nos desafían a visitarlas y llenar nuestras mentes de cultura, pero la depresión de volver al gris y húmedo Lyon nos magnetiza a los bancos y fuentes que envuelven las pirámides. El choque de arquitectura ya pasa desapercibido para los habitantes, pero al igual que la Torre Eiffel, estos dos triángulos de metal en tres dimensiones del chino Ieoh Ming Pei fueron origen de muchos debates. Como todo en la ciudad de la luz, merece unas buenas postales y también un estupendo vídeo de momento está en elaboración y que pronto os enseñaré también por aquí. Por lo demás y vista la gran acogida del relato en el blog os presentaré dentro de poco un segundo volumen de todas esas historias de ayer y de hoy que últimamente se me pasan mucho por la cabeza. Por cierto, se me olvidaba :  bienvenido Junio!





Fotos Sello C L I C K